El caballero Paquiao

No me gusta decirlo, pero "se los dije".

Antonio Margarito no tenia recursos para vencer a Manny Paquiao. Margarito se vio lento, inseguro; yo diría que incluso con miedo. Paquiao no fue exigido en ningún momento ni se sintió acorralado jamás. Margarito solo se dedicó a aguantar, a esperar, a recibir y recibir golpes. Así no se gana una pelea, la que sea, mucho menos un título.

Pero la victoria más grande que tuvo el día de ayer Paquiao no fue la de los golpes sino la de eduación y buenas maneras, ahí es donde se define a los grandes y él sin duda lo fue ayer. Paquiao tuvo para haber aniquilado a Margarito y no lo hizo, lo respetó. Los últimos 3 rounds, cuando la pelea ya no tenía razón de ser pues Margarito ya estaba muy golpeado y no veía bien. Paquiao fue respetuoso ante un boxeador que no lo supo ser antes de la pelea. Margarito quiso ganar con la boca. Dijo, ofendió, amenazó y al final, a la hora d la hora fue una simple caricatura de sí mismo.

Margarito debió entender que su carrrera acabó cuando fue suspendido por hacer trampa.

Por otro lado, fue penoso escuchar al comentarista justificar la triste actuación de Margarito.

La buena Noticia para el tijuanense es que con esos 09 millones de dólares que se ganó más su porcentaje por el pago por evento ya se puede dedicar a otra cosa.

El box, como la vida, es de los que se atreven.